Mi bienquerido y admirado vecino Edu me enviaba ayer de madrugada por facebook esta imagen, sacada en ese mismo momento. ¿Qué donde se encontraba? Na, aquí al ladito, en un sitio llamado Sapporo, en la isla de Hokkaido. Lo que viene siendo Japón, vaya. Y claro, el pobre se alarmó…

El mundo conspira contra #AdelgazaMOS !!

No tengo palabras para describir las risas que nos hechamos por un momento… “Malditos Japos, vienen a por mi!” – pensé para mis adentros – “No serán capaces de tentarme!! Si Jose Manuel, el diablo de las dietas, no pudo conmigo, toda una franquicia del fastfood oriental con mi apodo como marca no podrá hundirme!!”

Coñas a parte, fueron unas buenas risas. Y también, he de reconocerlo, mucha ilusión. Que un gran tipo como Eduardo me animase y felicitase por la iniciativa, y que se enterase de mi pequeña gran lucha contra la gula que siempre me tienta, no hizo más que afianzarme en mi idea inicial. Estoy contando lo que voy sintiendo día a dia, lo que voy comiendo, lo que voy haciendo por no anclarme en lo que antes siempre hacía… En definitiva, intentando cambiar un poco el rumbo, que no es moco de pavo.

Así que esta entrada, un poco aprovechando que pasaba por aquí… va dedicada a todos vosotros, que me seguís animando en mi empeño. Y en especial también a todas aquellas personas como Fran, que me envía fotos de sus #champiLatas nocturnos, o a mister Tripod que se acerca a comer conmigo el menú light del Insua, ¡viniendo desde Santiago! A Marcos, por darme una de cal y otra de arena, para recordarme siempre por ande ando. Y por supuesto a Javi, que siempre me acompaña en cada menú, que aunque dice que lo hace por él, sé que en el fondo también lo hace por ayudarme en este caminito, que ya me ha visto en otros antes y sabe que soy débil… con su buen humor todo siempre es más facil! #Impagable

Pero, de entre tantos amigas y amigos que me han agradecido mi predisposición a exponerme y a contarlo con el mejor humor del que soy capaz… tengo que destacar la apuesta constante del primero que me animó a tomarme en serio la meta que siempre tenía en mente, la de recuperar mi energía y deshacerme de mis kilos de más… apostado por mi desde el primer día. ¿Y hasta dónde llega? Pues hasta aquí…

Gracias meu… Dentro de todo lo que me cuesta a veces, así se me hace todo mucho menos cuesta arriba.